Venecia en enero
Venecia es una ciudad que jamás desilusiona.
Si la has visitado antes, siempre vuelve a sorprenderte. Y si vas a conocerla por primera vez, puede que sientas que ya lo has visto todo, por la cantidad de imágenes que has podido ver de la ciudad y puede que pienses que no te va a cautivar, e incluso que va a ser artificial… pero todo lo contrario; es de las ciudades mas apasionantes que existen.
Yo intento huir siempre de las grandes multitudes de turistas y me pareció buena idea visitar la ciudad en el mes de enero. Y aunque tuve dudas sobre el tiempo que iba a hacer y sobre si iba a ser posible disfrutar de la ciudad visitándola este mes, arriesgué y fue la mejor decisión.
Venecia en enero te permite disfrutar de la ciudad con mucha más autenticidad que visitándola los meses de temporada alta. No hay cola para acceder a los museos, a las iglesias y a los edificios icónicos de la ciudad. Y puedes utilizar el Vaporetto para moverte por el gran canal sin problemas de espacio e igual ocurre con el Alilaguna para llegar desde el aeropuerto y viceversa.
La magia de Venecia comienza en el mismo aeropuerto. Aterrizar y seguir las direcciones de water taxi hasta llegar al muelle de donde sale el Alillaguna e ir en barco hasta la ciudad…
El Allilaguna es súper cómodo. Puedes comprar los tickets online o en las taquillas que hay en el muelle del mismo aeropuerto. Tiene 4 líneas con 4 rutas diferentes, si te vas a alojar en algún hotel o casa cerca del gran canal, la línea naranja lo recorre entero. En su página web o en el folleto que te dan en la taquilla puedes consultar en que paradas se detiene exactamente y los horarios. Normalmente pasan cada media hora. (Es un barco no muy grande que tarda 40 minutos del aeropuerto a la ciudad de Venecia. En invierno no había ningun problema de espacio, pero en verano hay que tener cuidado porque como pase un Alillaguna completo, tendrás que esperar media hora hasta que pase el siguiente y puedes perder el avión si no calculas bien los tiempos.)
Lo que más me gustó de Venecia:
- Madrugar el sábado y coger un Vaporetto a las 8:30 de la mañana en la estación de San Marcuola-Casino, recorrer el Gran Canal en Vaporetto hasta la Plaza de San Marco y no creerme los colores que se ven en Venecia por la mañana… los edificios reflejados en el agua, las gondolas amarradas en los muelles de los palacios… es un paseo de una belleza inigualable.
- Alojarme en la zona de Cannaregio, y sentirme como un veneciano al pasear por sus callecitas de noche siendo la única persona en la calle, solo escuchando las gotitas de agua caer al estar rodeada de pequeños canales y el más absoluto silencio de fondo. Es muy impresionante.
- Ver la fachada del Palacio Ca D’Oro desde el Gran Canal, en góndola o en Vaporetto.
- Visitar la Basílica de San Giorgio Magiore, construida por el brillante arquitecto Andrea Palladio, y subir a su campanille desde donde tendrás, en mi opinión, las mejores vistas de Venecia. La Basílica se encuentra en una isla del mismo nombre, situada en frente de la Plaza de San Marco. Se puede llegar hasta ella en Vaporetto. Desde el Campanille hay una vista panorámica de la ciudad, completamente fascinante. Se detiene el tiempo observando el tráfico del Gran Canal, las vistas de la plaza de San Marcos, su Basílica y Campanile, el Palacio Ducal, los tejados de Venecia, sus puentes. Se puede ver la zona de Giudecca y la Iglesia del Redentor. También los maravillosos jardines del convento que hay en la misma isla. Si el día está claro, incluso se pueden ver los Alpes de fondo, como un escenario donde hubieran dibujado la abrumadora ciudad.
- Las vistas desde el T-Fondaco Rooftop del centro comercial del Puente Rialto.
- Recorrer el Gran Canal en Vaporetto al anochecer… y volver a alucinar con las luces de los edificios reflejadas en el agua y la magia de la ciudad en la oscuridad.
- Dar un paseo en góndola por los pequeños canales de la zona de Cannaregio y Santa Croce. No ver turistas y solo escuchar el agua goteando y silencio de fondo al ir navegando a remo… (Cogimos la gondola en el puente de Guglie. Los gondoleros suelen parar en determinadas zonas. Y me encantó hacer el paseo por aquí, porque evitas el tráfico del gran canal y haces un paseo más auténtico y menos turístico).
- Ver la preciosa Scala Contarini del Bovolo.
- Tomar un café la mañana del domingo sentada en la terraza del Caffe Saraceno viendo como los venecianos entrenaban para las regatas. (Cada café 7euros)
- Restaurantes que me encantaron:
Trattoria Bar Pontini. Cannaregio, 1268, 30121 Venezia
Es un pequeño restaurante al lado del puente de las agujas (Guglie), sin ningún tipo de pretensiones. Con una pequeña terracita. Fue donde tomamos la mejor pasta de tinta negra, la mejor pasta con almejas y la mejor pasta con langostinos de toda la ciudad. Hay tanto turistas como locales. Y buena selección de vinos, de hecho el camarero fue encantador y fue el quien nos recomendó un vino italiano que nos gustó muchísimo.
Ristorante Ai Barbacani. Calle del Paradiso, 5746, 30122
Restaurante muy pintoresco, en una pequeña calle, con vistas a un pequeño canal y un pequeño puente que lo cruza. Puedes ver pasar las góndolas mientras comes. Pescado frequísimo y pasta buenísima. Servicio muy atento de los camareros. A 6 minutos andando de la Plaza de San Marcos, pero sin estar rodeado de turistas.
Osteria al Portego. Calle de la Malvasia, 6014, 30122 Venezia
Auténtica Ostería veneciana. Nada turistico y sin ningún tipo de pretensión. Me llevó a comer aquí una íntima amiga italiana de Venecia. Tapas (Cichettis), pescados frescos y pastas excelentes. Apuntan en una pizarra los pescados del día. Todo buenísimo. También tienen buena selección de vinos. Sitio super auténtico y 100% recomendable.
Por último, os voy a recomendar el piso donde me quedé yo. Un piso en la zona de Cannaregio, completamente nuevo. Decorado con mucho gusto. Súper cómodo, alejado de la zona turística. Con la parada de Guglie a 3 minutos andando. (Parada de Alilaguna, con lo cual es comodísimo para ir al aeropuerto). Lo alquilé a través de airbnb y la dueña nos cuidó más que si nos hubiéramos quedado en un hotel de 5 estrellas. Se trata del Evelina Apartment. No dudéis en escribirme si queréis que os ayude a alquilarlo o si tenéis cualquier duda.
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